La bachata en nuestros días está marcada por el surgimiento de formas digitalizadas de música y la introducción de otros aires e instrumentos como: congas, saxofones y timbales, además de fusiones con otros géneros musicales. En las letras se siente una influencia de la etapa rosa, en contraste con el doble sentido erótico-sexual de la bachata anterior a los años ochenta. No obstante, se mantiene el sentido que le había dado origen como las expresiones de amor-desamor, la nostalgia y la propuesta de estilos de vida donde la mujer es fuente originaria del amor y del deseo.
En esta etapa, la bachata se masifica y se impone como un ritmo con características propias. Desaparece por completo la empresa La Guarachita y su emisora. Aparece la figura del empresario y el promotor artístico internacional y los artistas de la bachata se convierten en fenómenos de popularidad. Voces como Blas Duran, Ramón Torres, El Chaval de la Bachata, Zacarías Ferreira, Luis Miguel del Amargue, Elvis Martínez, Frank Reyes, Teodoro Reyes, Raulín Rodríguez, Antony Santos, Yoskar Sarante, Chicho Severino, Luis Vargas y Joe Veras, forman la nueva legión del género.
Aparecen dúos como Monchy y Alexandra y Xtreme a la par de grupos como Aventura y solistas como Ivy Queen,6 Prince Royce, Maite Perroni, Toby Love, Daniel Santacruz o Romeo Santos, que son parte de la nueva generación de artistas bachateros, algunos de ellos no nacidos en la República Dominicana.